Hechos sobre: Sylvilagus brasiliensis
El tapetí, también conocido como conejo brasileño de cola de algodón o conejo de cola de algodón del bosque, es un conejo de tamaño pequeño a mediano con características distintivas: una cola pequeña y oscura, patas traseras cortas y orejas cortas. Aunque anteriormente se pensaba que su distribución abarcaba desde el sur de México hasta el norte de Argentina, investigaciones recientes sugieren que lo que antes se consideraba una sola especie podría representar en realidad varias especies distintas. Según el conocimiento actual, el verdadero tapetí se encuentra únicamente en la Selva Atlántica a lo largo de la costa noreste de Brasil y está clasificado como "En Peligro" por la UICN.
Descrito por primera vez por Carl Linnaeus en 1753, el tapetí ha recibido numerosos nombres a lo largo del tiempo, incluidos conejo de cola de algodón del bosque y conejo brasileño de cola de algodón. Aunque en el pasado se identificaron hasta 37 subespecies, las clasificaciones recientes han reducido este número e incluso han introducido nuevas especies como Sylvilagus andinus, Sylvilagus gabbi, Sylvilagus sanctaemartae, Sylvilagus tapetillus y Sylvilagus parentum.
En cuanto a su apariencia, el tapetí se caracteriza por tener un pelaje marrón con un aspecto moteado, una mancha rojiza en el cuello y un vientre y parte inferior de la cola de color rufo. Estos conejos son nocturnos y solitarios, alimentándose de hierba, brotes y, ocasionalmente, hongos.
El tapetí habita diversos tipos de bosques, incluidas selvas tropicales, bosques caducifolios y bosques de crecimiento secundario en México, América Central y partes de América del Sur. Su rango se extiende desde el sur de México hasta Argentina y puede encontrarse a diferentes altitudes. Los tapetís construyen sus nidos sobre el suelo y presentan distintos períodos de gestación y tamaños de camada, dependiendo de su ubicación.
Un dato interesante sobre el tapetí es su papel como hospedador natural del virus del mixoma, descubierto en la década de 1940. Este virus causa mixomatosis en los conejos europeos, una enfermedad que puede ser letal, mientras que en los tapetís generalmente resulta en tumores cutáneos benignos.