Catedral Vieja de Salamanca, Salamanca

La Catedral Vieja de Salamanca, conocida también como Catedral de Santa María, es una de las joyas del románico en España y un testimonio monumental de la historia religiosa y arquitectónica de la ciudad de Salamanca. Construida entre los siglos XII y XIII, esta iglesia está ubicada en el corazón de la ciudad, formando un conjunto arquitectónico excepcional junto a la más moderna Catedral Nueva.

La Catedral Vieja destaca por su impresionante torre del gallo, así nombrada por el veleta en forma de gallo que corona su cúspide. Su fachada, un portento del estilo románico con influencias góticas, contiene una magnífica portada ricamente decorada con figuras bíblicas y elementos ornamentales que capturan la atención de creyentes y amantes del arte por igual.

El interior del templo, aunque más austero que su sucesora gótica, conserva valiosas obras de arte, entre ellas el retablo mayor, una obra maestra del arte románico que narra episodios de la vida de Cristo y de la Virgen María. Las capillas laterales albergan tesoros de la imaginería religiosa y sepulcros de importantes figuras históricas.

La Catedral Vieja de Salamanca es un lugar de culto activo y un importante destino turístico, que ofrece a sus visitantes la posibilidad de sumergirse en el ambiente espiritual y artístico de épocas pasadas. Además, su ubicación privilegiada permite disfrutar de las demás maravillas arquitectónicas de Salamanca, como la Universidad, la Casa de las Conchas y la Plaza Mayor.