Hechos sobre: Balaenoptera physalus
La ballena de aleta, a menudo llamada rorcual común, es una majestuosa criatura marina y la segunda especie más grande del planeta, solo superada por la ballena azul. Estas impresionantes criaturas pertenecen a la familia de las ballenas con barbas y presentan cuerpos esbeltos y delgados de color gris marrón con partes inferiores más claras. Pueden alcanzar una longitud asombrosa de hasta 27.3 metros (alrededor de 90 pies) y pesar hasta 114 toneladas (125 toneladas).
Las ballenas de aleta se encuentran en todos los principales océanos, desde las frías aguas polares hasta los cálidos mares tropicales. Su dieta consiste principalmente en pequeños peces en cardúmenes, calamares y crustáceos, que filtran a través de sus placas de barbas.
Desafortunadamente, el siglo XX fue devastador para las ballenas de aleta debido a la intensa caza, lo que resultó en una drástica disminución de su número. Actualmente, están clasificadas como en peligro de extinción, con estimaciones que sugieren que quedan entre 100,000 y 119,000 individuos en todo el mundo. La Comisión Ballenera Internacional (CBI) ha prohibido la caza comercial de ballenas de aleta, pero países como Islandia y Japón han reanudado su caza. Además, los groenlandeses las cazan bajo las reglas de Caza de Subsistencia Aborigen de la CBI.
Existen dos subespecies reconocidas de ballenas de aleta: la ballena de aleta del norte y la ballena de aleta del sur. Curiosamente, estudios recientes de ADN sugieren que las ballenas de aleta podrían estar más estrechamente relacionadas con las ballenas jorobadas y las ballenas grises que con otros miembros de su propio género. Estas ballenas se pueden identificar fácilmente por su alto chorro de agua, largo lomo, prominente aleta dorsal y su coloración única asimétrica.
Las ballenas de aleta tienen ciclos de vida fascinantes. Se aparean en aguas templadas durante el invierno, y las hembras dan a luz cada 2-3 años. Alcanzan la madurez sexual entre los 6 y los 12 años y pueden vivir al menos 94 años. Conocidas por su velocidad, las ballenas de aleta han ganado el apodo de "el galgo del mar". Son bastante sociales y a menudo se las ve en grupos de 6-10 individuos, aunque las reuniones de alimentación a veces pueden incluir hasta 100 ballenas.
Estas magníficas criaturas enfrentan varias amenazas inducidas por los humanos, como colisiones con barcos, la caza continua en ciertas regiones y capturas ilegales. Las colisiones con barcos son una causa significativa de muerte para las ballenas de aleta, y sus hábitats también están sufriendo degradación y contaminación, incluidos altos niveles de microplásticos.
Se están llevando a cabo esfuerzos de conservación para proteger a las ballenas de aleta. Están listadas en el Apéndice I y el Apéndice II de la Convención sobre la Conservación de Especies Migratorias de Animales Silvestres (CMS). Varios acuerdos, como ACCOBAMS y el Memorando de Entendimiento sobre Cetáceos del Pacífico, tienen como objetivo salvaguardar sus poblaciones y hábitats. Se están realizando esfuerzos continuos para abordar estas amenazas y asegurar la supervivencia a largo plazo de estas increíbles criaturas.