Hechos sobre: Carlito syrichta
El tarsero filipino, conocido localmente como "mawumag" en cebuano y otros idiomas visayanos, es un diminuto primate que habita en Filipinas. Pertenece a la familia Tarsiidae y es el único miembro del género Carlito, nombrado en honor al conservacionista Carlito Pizarras. Estas fascinantes criaturas pueden encontrarse en varias islas, incluidas Bohol, Samar, Leyte y Mindanao.
Midiendo solo entre 85 y 160 mm de altura, el tarsero filipino es uno de los primates más pequeños del mundo. Se distingue por sus grandes ojos fijos y un cuello único que le permite girar la cabeza 180°. En cuanto a su alimentación, estas criaturas nocturnas prefieren insectos, arañas, pequeños crustáceos e incluso pequeños vertebrados.
Los tarseros filipinos son arborícolas y generalmente viven solos. Se comunican mediante diversas vocalizaciones, frecuencias de ultrasonido y marcas de olor. En cuanto a la reproducción, tienen un período de gestación de seis meses, con las hembras dando a luz a una sola cría a la vez.
Desafortunadamente, el tarsero enfrenta amenazas significativas debido a la pérdida de hábitat por deforestación, tala y la invasión humana. Para combatir estos problemas, se han implementado esfuerzos de conservación, incluidos la creación de santuarios y la implementación de leyes protectoras. Organizaciones como la Fundación del Tarsero Filipino y Endangered Species International también están trabajando arduamente para salvar a esta especie.
Se han establecido varias leyes de conservación, como las Órdenes Administrativas del DENR y las Leyes de la República, para proteger al tarsero y su hábitat. Aunque la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) clasifica al tarsero filipino como casi amenazado, persisten desafíos como la destrucción del hábitat y el comercio ilegal de mascotas. Crear conciencia, hacer cumplir las leyes de conservación y preservar los hábitats naturales son pasos esenciales para asegurar la supervivencia de este primate único.