Hechos sobre: Pitta angolensis
El pita africano es un ave colorida de la región afrotropical, perteneciente a la familia Pittidae. Esta especie, tanto residente como migratoria, se desplaza entre el África ecuatorial y el sureste de África. A pesar de sus llamativos colores, observar un pita africano es un verdadero placer, ya que son aves tímidas y sus llamados no se escuchan con frecuencia.
Estas aves prefieren buscar alimento entre la hojarasca bajo el dosel del bosque, ya sea rascando en busca de presas o permaneciendo perfectamente quietas. Después de las lluvias, los individuos reproductores se vuelven más vocales y pueden observarse exhibiéndose en el estrato medio del dosel.
El pita africano fue descrito por primera vez por Louis Jean Pierre Vieillot en 1816 y se le asignó el nombre científico de Pitta angolensis. Existen tres subespecies reconocidas, aunque los expertos aún debaten sobre su clasificación exacta. Esta ave está estrechamente relacionada con el pita de pecho verde, y juntas forman parte de una superespecie del Viejo Mundo.
Tanto los machos como las hembras del pita africano comparten un plumaje colorido similar. Se encuentran típicamente en bosques riparios deciduos en el sureste de África, con hábitos específicos de reproducción y migración. Curiosamente, algunas aves incluso migran más allá de su rango habitual.
En cuanto a su alimentación, los pitas africanos saltan y rascan entre la hojarasca, buscando insectos y moluscos. Durante la temporada de reproducción, estas parejas monógamas realizan exhibiciones y construyen nidos en forma de cúpula en las ramas de los árboles.
Sin embargo, la pérdida de hábitat es una preocupación creciente para el pita africano, lo que ha llevado a la disminución de las poblaciones en algunas áreas. Los esfuerzos de conservación son esenciales para proteger sus hábitats y abordar amenazas como la destrucción del entorno natural y las colisiones con estructuras iluminadas.