Hechos sobre: Arquero de Amesbury
En 2002, los arqueólogos realizaron un descubrimiento fascinante cerca de Stonehenge, en Amesbury, Inglaterra: la tumba de un hombre de la Edad del Bronce temprano, conocido como el Arquero de Amesbury. Su sepultura contenía una rica colección de artefactos, entre ellos puntas de flecha, objetos de oro ―los más antiguos encontrados en Inglaterra―, vasijas funerarias, cuchillos de cobre y herramientas para tallar sílex. Estos hallazgos sugieren que era un hábil herrero de cobre, presumiblemente originario de Europa central. Hoy, su esqueleto se exhibe en el Museo de Salisbury.
Cerca de allí, los investigadores descubrieron otra tumba, que se cree perteneció a un hombre más joven, posiblemente relacionado con el Arquero. Este individuo presentaba una rara anomalía hereditaria, añadiendo otra capa de interés al hallazgo. Ambas tumbas fueron encontradas en proximidad a las de los Arqueros de Boscombe, otro descubrimiento arqueológico significativo.
Cuando el Arquero fue desenterrado por primera vez, los medios de comunicación lo apodaron rápidamente el "Rey de Stonehenge", lo que provocó especulaciones sobre su posible papel en la construcción del famoso monumento. Sin embargo, estudios arqueológicos más recientes sugieren que podría haber sido un peregrino atraído a Stonehenge por sus presuntos poderes curativos. Su tumba es especialmente importante porque destaca las conexiones con Europa continental, las primeras prácticas de fundición de cobre y la difusión de la cerámica de la Cultura del Vaso Campaniforme.