Tughlaqabad Fort, Nueva Delhi

La Fortaleza de Tughlaqabad, el legado de un sueño ambicioso y una advertencia histórica de la arrogancia de un sultán, se alza como una imponente reliquia del pasado en la vibrante ciudad de Delhi, India. Este monumento medieval, construido en el siglo XIV por el fundador de la dinastía Tughlaq, el Sultán Ghiyas-ud-din Tughlaq, es una muestra del poderío y la fortificación militares de la época.

Con sus muros macizos y su ubicación estratégica, Tughlaqabad Fort fue diseñado para ser una fortaleza inexpugnable. Sin embargo, la historia cuenta que la construcción de la fortaleza se vio empañada por un conflicto entre el sultán y el famoso santo sufí Nizamuddin Auliya, lo que resultó en una maldición que condenó la fortaleza a la desolación.

Hoy en día, lo que queda de esta vasta estructura cuenta la historia de su antigua grandeza y su posterior abandono. Las ruinas de Tughlaqabad se extienden sobre un área de aproximadamente 6.5 kilómetros cuadrados y se dividen en tres partes: la ciudad más grande, la ciudadela y la torre de vigilancia conocida como Bijai-Mandal. A pesar de su estado de deterioro, la fortaleza aún conserva bastiones imponentes, muros altos y pasajes subterráneos que evocan la imagen de lo que fue un tiempo de esplendor y conflicto.

La fortaleza es accesible a los visitantes y ofrece una ventana única al pasado de Delhi. No solo es un lugar de interés para los entusiastas de la historia, sino también para aquellos que buscan un escape del bullicio de la ciudad y desean explorar los vestigios de la arquitectura medieval india. Aunque no tan cuidada como otros monumentos en Delhi, Tughlaqabad Fort sigue siendo un testimonio de la historia y la arquitectura de la India.