Palacio de Leh, Leh

El Palacio de Leh, ubicado en la ciudad homónima de la India, es una joya histórica que domina majestuosamente el horizonte del desierto del Himalaya. Este palacio fue construido en el siglo XVII, específicamente en el año 1553, por el rey Sengge Namgyal y ha sido testigo de la rica historia cultural de la región de Ladakh.

Con su arquitectura imponente, el Palacio de Leh se asemeja a la famosa Potala de Lhasa en Tíbet, y no es casualidad, pues su diseño se inspiró en aquel icónico edificio. A pesar de que ahora se encuentra en estado de ruina, el palacio de nueve pisos aún conserva su encanto y ofrece una vista panorámica sin igual de la ciudad de Leh y las montañas circundantes.

El acceso al palacio es una experiencia en sí misma, con sus estrechos pasadizos y escaleras que llevan a distintas habitaciones y patios. En su interior, los visitantes pueden explorar las reliquias que permanecen, incluyendo murales antiguos y una rica colección de artefactos que reflejan la herencia budista de la región.

El Palacio de Leh no es solo un atractivo turístico, sino también un lugar de importancia arqueológica. La ASI (Archaeological Survey of India) ha tomado medidas para su preservación, y se han realizado esfuerzos para restaurar algunas partes del palacio.

Para el turista promedio, una visita al Palacio de Leh es una oportunidad de sumergirse en la historia de Ladakh y disfrutar de una de las mejores vistas de la ciudad. Es recomendable llevar calzado cómodo para la caminata y una cámara para capturar la belleza del paisaje. La mejor época para visitar es entre mayo y septiembre, cuando el clima es más favorable.