Hechos sobre: Murabba
El murabba es una exquisita conserva de frutas apreciada en regiones como el Cáucaso Sur, Asia Central, Asia del Sur y el Medio Oriente. Generalmente, se elabora utilizando frutas, azúcar y especias, y se presenta en versiones tanto húmedas como secas. Entre las frutas populares para hacer murabba se incluyen la manzana, el albaricoque, la grosella, el mango, la ciruela y el membrillo. Estas conservas no solo son sabrosas, sino que también se conocen por su larga vida útil y sus potenciales beneficios para la salud. De hecho, el murabba ocupa un lugar especial en la medicina tradicional y popular de la India.
Un tipo popular de murabba es el murabba de jengibre, o jengibre confitado. Elaborado con jengibre y azúcar, este dulce es especialmente popular en Tamil Nadu, Kerala, Andhra Pradesh y Karnataka, en el sur de la India. Se cree que ayuda con la digestión, las náuseas y las náuseas matutinas, y a menudo se disfruta como un caramelo.
En el Cáucaso Sur, el murabba generalmente se prepara con frutas locales como fresas y cerezas. Después de viajar a la India, los georgianos comenzaron a hacer murabba de mango, que desde entonces se ha convertido en un favorito en la cocina gujarati. En Azerbaiyán, el murabba no solo se sirve como postre acompañado de té, sino también como un remedio para los resfriados. Variaciones como cornejo, moras y grosellas, ricas en vitamina C, se disfrutan comúnmente durante la temporada de gripe.
Conservas de frutas similares, conocidas como varenye, se pueden encontrar en países de Europa del Este como Bielorrusia, Rusia y Ucrania. Estas conservas comparten muchas similitudes con el murabba en términos de preparación y uso.