Hechos sobre: Gavia stellata
El colimbo chico, también conocido como el colimbo de garganta roja, es un ave migratoria fascinante que habita en todo el hemisferio norte. Se distingue por ser el miembro más extendido de la familia de los colimbos, reproduciéndose en regiones árticas y pasando los inviernos en aguas costeras del norte. Aunque es el más pequeño y ligero de los colimbos, mide entre 55 y 67 centímetros de longitud, esta ave es bastante notable.
Durante la temporada de reproducción, el colimbo chico presenta una llamativa mancha rojiza en la garganta, de donde proviene su nombre. Su dieta se basa principalmente en peces, pero también consume anfibios, invertebrados e incluso algunas plantas. Estos colimbos son conocidos por sus fuertes lazos de pareja, con ambos miembros compartiendo las responsabilidades de construir el nido, incubar los huevos y alimentar a sus crías.
Taxonómicamente, el colimbo chico es una especie monotípica, lo que significa que no tiene subespecies. Su nombre de género se deriva del latín, que significa "gaviota de mar", y su epíteto específico se refiere al dorso moteado del ave cuando no está en plumaje de reproducción. Adaptados a la vida acuática, estos pájaros tienen huesos densos que les ayudan a bucear y patas palmeadas para nadar eficientemente. En plumaje de reproducción, son fácilmente reconocibles por su cabeza gris oscura, partes inferiores blancas y la icónica mancha roja en la garganta.
A pesar de tener una gran población global, los colimbos chicos enfrentan varias amenazas. Derrames de petróleo, pérdida de hábitat, contaminación y redes de pesca representan riesgos significativos. Sus depredadores naturales incluyen gaviotas y zorros. Afortunadamente, los tratados internacionales ofrecen cierta protección para esta especie. Son migrantes diurnos, a menudo viajando solos o en pequeños grupos, y son fuertes voladores. Su dependencia de los peces los hace vulnerables a los contaminantes ambientales.
Aunque no están en peligro globalmente, algunas poblaciones de colimbo chico están experimentando declives. Los esfuerzos de conservación son cruciales para mitigar amenazas como derrames de petróleo, destrucción de hábitat y redes de pesca. Estas aves también albergan varios parásitos y pueden verse afectadas por enfermedades como la gripe aviar y el botulismo.
En la cultura humana, el colimbo chico ha tenido una presencia notable. Históricamente, fueron cazados para alimento, y sus pieles se usaban para decorar ropa. También aparecen en los mitos de creación de los pueblos indígenas y se les ha vinculado a la predicción del clima en algunas culturas. Países como Bután, Japón y Finlandia incluso han presentado a esta llamativa ave en sus sellos.