Hechos sobre: Gyps fulvus
El buitre leonado, también conocido como buitre leonado euroasiático, es un ave grande e impactante de la familia Accipitridae. Aunque difiere del buitre de Rüppell, guarda una estrecha relación con el buitre dorsiblanco. Estas majestuosas aves tienen una envergadura de 2.3 a 2.8 metros y suelen pesar entre 6.2 y 10.5 kg, sin diferencias significativas entre machos y hembras. Como carroñeros, los buitres leonados se alimentan de cadáveres de animales, que localizan al volar sobre paisajes abiertos.
Los buitres leonados prefieren anidar en acantilados, donde ponen un solo huevo. A menudo forman colonias dispersas durante la temporada de reproducción. Se pueden encontrar en el sur de Europa, el norte de África y Asia. Gracias a los esfuerzos de conservación y a las prohibiciones de caza, algunas poblaciones están mostrando signos de recuperación.
En Europa y Asia, los buitres leonados han sido avistados en numerosos países, incluyendo Italia, donde los esfuerzos de reintroducción han sido exitosos, así como en Croacia, las Islas Británicas, Chipre, Israel, Grecia, Francia, Bélgica, los Países Bajos, Alemania, Serbia, Suiza, Austria, España, Armenia y Rusia. Sin embargo, a pesar de estos esfuerzos, la población ha enfrentado retrocesos debido al envenenamiento por cebos dejados por humanos.
Los científicos han estudiado extensamente a los buitres leonados, particularmente su fisiología. Estas aves son voladoras excepcionales, utilizando técnicas de planeo para conservar energía. Además, tienen una forma única de manejar la temperatura corporal gracias a sus cabezas calvas, lo que les permite soportar condiciones extremas sin necesidad de buscar refugio. Los estudios sobre la competencia intraespecífica han demostrado que los buitres más viejos tienden a ser más agresivos y dominantes, especialmente cuando la comida escasea.
El buitre leonado no solo es un ave fascinante, sino también una parte crucial del ecosistema, sirviendo como el "equipo de limpieza" de la naturaleza. No obstante, enfrentan amenazas significativas como el envenenamiento y la pérdida de hábitat. Los continuos esfuerzos de conservación son esenciales para asegurar su supervivencia y mantener el equilibrio en sus hábitats naturales.