Victory Day

El Día de la Victoria es un feriado público muy estimado en Malta, celebrado cada año el 8 de septiembre. Esta fecha conmemora el final de tres asedios cruciales en la historia maltesa: el Gran Asedio de Malta por el Imperio Otomano en 1565, el bloqueo francés de La Valeta en 1800 y el asedio italiano durante la Segunda Guerra Mundial en 1943. Además, coincide con la festividad de la Natividad de María, celebrada en varios pueblos de Malta. Localmente, el día es conocido cariñosamente como il-Vitorja (la Victoria) y il-Bambina (el Bebé).

Las celebraciones están cargadas de tradición, incluyendo las famosas regatas en el Gran Puerto. El 7 de septiembre de 1565, los otomanos se retiraron tras la llegada de una flota siciliana que acudió en ayuda de los malteses durante el Gran Asedio. La rendición de las tropas francesas en 1800 y el final del asedio en la Segunda Guerra Mundial en 1943 también son eventos históricos clave conmemorados en este día. Cabe destacar que la retirada de Italia de la guerra en 1943 marcó un punto de inflexión que llevó a Malta a ser galardonada con la Cruz de Jorge por su valentía ante bombardeos implacables.

El Día de la Victoria está lleno de actividades culturales como lecturas literarias, música y presentaciones artísticas en La Valeta. Las Fuerzas Armadas de Malta realizan un desfile en la ciudad, saludan al Primer Ministro y asisten a una misa en la Concatedral de San Juan. El Presidente de Malta también coloca una corona de flores en el Monumento del Gran Asedio en honor a quienes perdieron la vida en los asedios. El Consejo Maltés para el Deporte organiza la regata, añadiendo emoción al día.

En Gozo, se lleva a cabo una ceremonia especial en la Plaza de la Independencia de Rabat, donde las Fuerzas Armadas de Malta participan en un desfile y colocan una corona de flores en el Monumento a la Guerra. El día también se caracteriza por las celebraciones festivas en Xagħra, Naxxar, Senglea y Mellieħa, todas en conexión con la Natividad de María.

El Día de la Victoria es un recordatorio conmovedor de la resiliencia de Malta y su papel significativo en la historia, celebrando la fuerza y el espíritu de la isla al superar la adversidad.