Hechos sobre: Kompot
El kompot, también conocido como compot, es una deliciosa bebida no alcohólica que se puede disfrutar tanto caliente como fría, lo que la convierte en una opción versátil para cualquier estación del año. Esta bebida se prepara hirviendo a fuego lento una mezcla de frutas como fresas, albaricoques, duraznos, manzanas, ruibarbo, ciruelas o cerezas ácidas en abundante agua. Para realzar su dulzor, a menudo se le añade azúcar o pasas, y para un toque de sabor adicional, se pueden incluir especias como vainilla o canela, especialmente cuando se sirve caliente durante el invierno.
Esta refrescante bebida es un elemento básico en muchos países de Europa Central y Oriental, así como en el sur de Europa. El kompot es apreciado en naciones como Albania, Armenia, Bielorrusia, la República Checa, Ucrania, Rusia, Polonia, Bulgaria, Bosnia y Herzegovina, Lituania, Letonia, Estonia, Hungría, Eslovenia, Croacia, Macedonia del Norte, Serbia, Montenegro, Eslovaquia, Moldavia, Rumanía, Austria, Grecia, Georgia, Chipre, Irán, Kazajistán, Tayikistán, Turquía, Azerbaiyán y Siria. Históricamente, era una forma popular de conservar frutas para los meses de invierno en el sur y el este de Europa.
Sin embargo, desde la década de 1980, la popularidad del kompot ha disminuido, ya que más personas han optado por otras bebidas como jugos de frutas, refrescos y agua mineral.
Una bebida similar al kompot es el uzvar, o vzvar, que se elabora con una variedad de frutas secas y, a veces, bayas, endulzado con miel o azúcar. Esta bebida tradicional comparte la misma esencia reconfortante y afrutada que el kompot, lo que la convierte en otra opción querida en estas regiones.