Hechos sobre: Talpa europaea
El topo europeo, también conocido como topo común o topo del norte, es un pequeño mamífero perteneciente al orden Eulipotyphla. Esta fascinante criatura pasa la mayor parte de su vida en sistemas de túneles que expande constantemente. Estos túneles sirven como terrenos de caza para sus presas favoritas: lombrices de tierra, insectos, ciempiés, ratones y musarañas. Curiosamente, la saliva del topo contiene toxinas que pueden paralizar a las lombrices, facilitando su captura.
Físicamente, el topo europeo tiene un cuerpo cilíndrico que suele medir entre 11 y 16 cm de longitud y pesar alrededor de 70 a 130 gramos. Su pelaje es generalmente de color gris oscuro, aunque existen variaciones de tonalidad.
Aunque el topo se encuentra principalmente bajo tierra, no está restringido a la vida subterránea. Puede adaptarse a diferentes entornos en función de factores como el tipo de suelo y la disponibilidad de alimentos. El topo tiene una breve temporada de reproducción en primavera, con un período de gestación que dura entre cuatro y cinco semanas. Las hembras suelen dar a luz camadas de entre dos y siete crías. Para mantener su energía, el topo europeo consume aproximadamente la mitad de su peso corporal en alimentos diariamente, alimentándose principalmente de lombrices de tierra.
Contrario a la creencia popular, el topo europeo no es completamente ciego. Sus ojos rudimentarios pueden detectar movimiento y algunos colores, lo que les ayuda a identificar depredadores dentro de sus túneles. Aunque el topo carece de orejas externas visibles, se cree que puede escuchar sonidos de baja frecuencia, lo que facilita su navegación subterránea.
El cuerpo del topo europeo está perfectamente adaptado a su estilo de vida. Su estructura esquelética permite una excavación eficiente y movimiento a través del suelo. Las diferencias en la dentición entre especies, como el topo romano y el topo europeo, también proporcionan valiosos conocimientos a los paleontólogos que estudian restos fosilizados.
