Hechos sobre: Sciurus granatensis
La ardilla de cola roja, nativa de regiones que abarcan desde el sur de Centroamérica hasta el norte de Sudamérica, se encuentra en países como Colombia, Costa Rica, Ecuador, Panamá, Trinidad y Tobago y Venezuela. Curiosamente, también se ha convertido en una especie invasora en Cuba. Estas ardillas prosperan en diversos entornos, desde el nivel del mar hasta los 3,000 metros de altitud, y se pueden avistar en varios tipos de bosques, incluso en áreas de picnic.
En 2015, los científicos reclasificaron esta especie como Notosciurus granatensis. La ardilla de cola roja es conocida por la diversidad en los colores de su pelaje, lo que dio lugar a la identificación de muchas subespecies a lo largo de los años. Sin embargo, estas subespecies fueron consolidadas en seis variaciones geográficas en 2015. Algunos expertos creen que una investigación adicional podría justificar la división en diversas especies distintas basadas en diferencias en su apariencia y composición genética.
Esta ardilla está estrechamente relacionada con Notosciurus pucheranii en Sudamérica y Sciurus richmondi en Nicaragua. Es una especie común con una población estable, adaptable a una variedad de hábitats, incluidos aquellos alterados por la actividad humana. Debido a esta adaptabilidad y presencia generalizada, la ardilla de cola roja no se considera actualmente en riesgo. Aunque ha sido introducida en Cuba, no se han reportado impactos negativos en la fauna nativa del país.