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Sigue la ruta de la naturaleza salvaje – turismo de naturaleza en Panamá

Panamá, un país que forma un puente natural entre América del Norte y América del Sur, es un verdadero crisol de biodiversidad. Con una variedad de ecosistemas que incluyen selvas tropicales, montañas, manglares y arrecifes de coral, Panamá alberga una asombrosa variedad de fauna silvestre. Aquí, especies emblemáticas de la región conviven con otras menos conocidas, pero no por ello menos fascinantes, que hacen de este destino un paraíso para los amantes de la naturaleza y la vida silvestre.

Iniciemos un recorrido por el mundo animal que habita en Panamá. Desde el majestuoso jaguar, el felino más grande de América y un escurridizo habitante de la densa selva del Darién, hasta el colorido quetzal, que con su plumaje vibrante y cola espectacular, adorna los bosques nubosos de Chiriquí. Sin olvidar la rica vida marina, donde especies como el delfín nariz de botella surcan las aguas del Caribe y el Pacífico panameño. La diversidad de aves es también notable, con más de 900 especies registradas, incluyendo al águila harpía, el imponente ave nacional de Panamá, que planea con gracia en los cielos tropicales.

Mamíferos de Panamá

En las exuberantes selvas de Panamá, los turistas pueden deleitarse con la presencia de una variedad de mamíferos fascinantes. El perezoso de tres dedos, con su lento desplazamiento, es un ícono de la biodiversidad panameña. Los monos, como el capuchino cariblanco y el aullador, son comunes y suelen escucharse antes de verse. El tapir bairdii, el mamífero terrestre más grande de Centroamérica, se refugia en las áreas protegidas del país. Los jaguares y pumas, aunque más esquivos, también habitan en los bosques panameños, siendo topes de la cadena alimenticia. Además, el oso hormiguero gigante y el armadillo son otros habitantes notables que complementan la rica fauna de esta nación centroamericana.

Aves de Panamá

En las exuberantes selvas y cielos de Panamá, se pueden avistar aves de impresionante belleza y diversidad. El quetzal resplandeciente, con su plumaje vibrante y cola espectacular, habita en los bosques nubosos, mientras que el harpía, una de las águilas más poderosas del mundo, reina en las copas de los árboles de la selva tropical. Los observadores de aves también se deleitan con el colorido tucán pico iris, fácilmente reconocible por su pico grande y colorido. Además, el país es un paraíso para los colibríes, incluyendo el diminuto colibrí zumbador, que revolotea entre las flores buscando néctar. Estas especies, junto con muchas otras, hacen de Panamá un destino excepcional para los entusiastas de las aves.

Reptiles, Anfibios

Mejores lugares para la observación de vida silvestre en Panamá

  • El Parque Nacional Darién, ubicado en la frontera con Colombia, es una de las áreas más extensas y biodiversas de Panamá. Aquí se pueden observar jaguares, pumas, tapir centroamericano y una gran variedad de aves como el águila harpía, el loro cariamarillo y el guacamayo rojo.
  • El Parque Nacional Coiba, una isla en el Pacífico, es un sitio de inmersión en la vida marina, con posibilidad de avistar delfines, ballenas jorobadas, tiburones y mantarrayas. En tierra, se pueden encontrar monos aulladores, el mono capuchino de Coiba y aves endémicas como el perico de Coiba.
  • El Parque Nacional Volcán Barú, cerca de la ciudad de Boquete, ofrece la oportunidad de ver quetzales resplandecientes, pumas, y el singular conejo de los volcanes. Además, es un lugar excelente para el avistamiento de aves debido a su elevación y variedad de hábitats.
  • La Reserva Biológica Isla Barro Colorado, en el Lago Gatún del Canal de Panamá, es un centro de investigación tropical y un refugio para especies como el mono aullador negro, el perezoso de tres dedos, el tamarino de Geoffroy y una impresionante diversidad de aves tropicales.
  • El Parque Nacional Marino Golfo de Chiriquí protege arrecifes de coral, manglares y una multitud de islas. Aquí se pueden ver tortugas marinas, como la tortuga carey y la tortuga verde, además de una gran variedad de peces tropicales y, ocasionalmente, ballenas y delfines.
  • El Parque Internacional La Amistad, compartido con Costa Rica, es un tesoro de biodiversidad con especies como el jaguar, el ocelote, el tapir bairdii y una gran cantidad de aves, incluyendo el colibrí de montaña y el jilguero.

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