Hechos sobre: Balaena mysticetus
La ballena de Groenlandia es una especie notable de ballena barbada, perteneciente a la familia Balaenidae y único miembro del género Balaena. Estos gigantes de las aguas árticas y subárticas deben su nombre a sus enormes cráneos triangulares, que utilizan para romper el grueso hielo del Ártico. Conocidas por tener la boca más grande de cualquier animal y las placas de barbas más largas, las ballenas de Groenlandia pueden vivir más de 200 años, lo que las convierte en uno de los mamíferos más longevos.
Históricamente, las ballenas de Groenlandia fueron cazadas intensamente por balleneros, lo que llevó a una disminución significativa en sus poblaciones. En la actualidad, algunos grupos de ballenas de Groenlandia están catalogados como en peligro de extinción o vulnerables.
Inicialmente, las ballenas de Groenlandia se clasificaban junto con las ballenas francas, pero investigaciones posteriores han demostrado que son lo suficientemente distintas como para ser colocadas en su propio género, Balaena. A diferencia de muchas otras ballenas, las ballenas de Groenlandia no tienen aleta dorsal, una adaptación que les ayuda a navegar bajo el hielo marino.
Por lo general, las ballenas de Groenlandia son solitarias o viajan en pequeños grupos. Son nadadoras lentas, pero pueden sumergirse hasta una hora. Su dieta se compone principalmente de zooplancton. La reproducción tiene lugar entre marzo y agosto, y las hembras dan a luz a una cría cada tres o cuatro años. Las ballenas de Groenlandia se destacan especialmente por su increíble longevidad, con algunos individuos viviendo más de dos siglos.
Las ballenas de Groenlandia son únicas entre las ballenas barbadas porque pasan toda su vida en aguas árticas. Sus poblaciones están dispersas en diferentes regiones, cada una enfrentando diversos niveles de amenaza. Aunque la caza comercial alguna vez las llevó al borde de la extinción, la caza actual está limitada a niveles de subsistencia por comunidades indígenas.
Para proteger a estas magníficas criaturas, se han implementado diversas medidas de conservación. La ballena de Groenlandia está incluida en varios acuerdos de conservación, y diferentes grupos poblacionales se reconocen con distintos niveles de peligro. A nivel mundial, la ballena de Groenlandia se considera de menor preocupación, pero poblaciones específicas están clasificadas como en peligro crítico, en peligro, vulnerables o dependientes de la conservación. Están protegidas bajo la Ley de Especies en Peligro de Extinción y varios acuerdos internacionales destinados a asegurar su supervivencia y la conservación de su hábitat.