Hechos sobre: Panthera pardus orientalis
El leopardo de Amur, una rara subespecie nativa de la región de Primorye en el sureste de Rusia y partes del norte de China, está actualmente catalogado como En Peligro Crítico en la Lista Roja de la UICN. En 2007, solo quedaban entre 19 y 26 ejemplares. Afortunadamente, para 2019, su número había aumentado a alrededor de 90 individuos. La investigación indica que la población del leopardo de Amur comenzó a fragmentarse a principios del siglo XX.
Estos leopardos son conocidos por su grueso pelaje de color crema pálido adornado con llamativas rosetas. Son más pequeños que otras subespecies de leopardos y están bien adaptados a entornos fríos y nevados. Históricamente, su hábitat se extendía por Manchuria y la península de Corea, pero ha disminuido significativamente a lo largo de los años.
El leopardo de Amur enfrenta numerosas amenazas, incluyendo la caza furtiva, la pérdida de hábitat, la degradación forestal y la endogamia. Para combatir estos problemas, se han implementado varios esfuerzos de conservación. El leopardo está listado en el Apéndice I de CITES, lo que le proporciona el más alto nivel de protección contra el comercio internacional. Se han establecido áreas protegidas, se han implementado medidas contra la caza furtiva y existe una colaboración continua entre biólogos rusos y chinos para el monitoreo transfronterizo. La Alianza para el Leopardo y el Tigre de Amur (ALTA) trabaja activamente para conservar esta especie y tiene como objetivo mantener una población estable de leopardos en la región.
También se están discutiendo planes para reintroducir estos leopardos en la naturaleza para crear una segunda población en el Lejano Oriente ruso. Se han establecido programas de cría en cautividad para ayudar a preservar su diversidad genética. Los nombres "leopardo de Amurland" y "leopardo de Amur" fueron acuñados por Pocock en 1930, y la especie también es conocida como "leopardo siberiano" y "leopardo del Lejano Oriente".