El retorno del hijo pródigo

"El regreso del hijo pródigo" es una célebre pintura al óleo de Rembrandt, considerada una de sus últimas obras maestras, completada alrededor de 1669. Esta obra ilustra la parábola bíblica del hijo pródigo, quien regresa a su padre después de malgastar su herencia y hundirse en la pobreza. En la pintura, el hijo aparece arrodillado en señal de arrepentimiento ante su padre, buscando perdón y reconciliación. El gesto tierno del padre encarna tanto el cuidado maternal como la aceptación paternal, mientras que el hermano mayor está de pie cerca, con una expresión que revela juicio ante la compasión del padre.

Rembrandt fue profundamente conmovido por esta parábola y exploró sus temas en varias obras a lo largo de los años. "El regreso del hijo pródigo" es particularmente elogiada por su profundidad espiritual y su representación del perdón. Los críticos de arte han destacado la extraordinaria capacidad de Rembrandt para representar temas religiosos y emociones humanas con un realismo y empatía profundos.

La pintura ha recibido aclamación generalizada. Eruditos como Rosenberg han reconocido su monumental importancia, y H. W. Janson la describió como una obra maestra conmovedora y atemporal que evoca un sentido de paz eterna y conexión. El sacerdote holandés Henri Nouwen se inspiró tanto en la pintura que escribió un libro titulado "El regreso del hijo pródigo: una historia de regreso al hogar", en el que explora los temas de la parábola en relación con la vida y el viaje espiritual de Rembrandt.