Hechos sobre: Corvus ruficollis
El cuervo de cuello marrón es un ave fascinante que se distingue por su envergadura y su coloración singular. Es más grande que el cuervo negro, pero no alcanza el tamaño del cuervo común. Se puede identificar fácilmente por su cabeza y garganta de un color negro amarronado, mientras que el resto de sus plumas exhiben un negro brillante que puede reflejar tonos de púrpura, azul o azul-púrpura.
Este cuervo es uno de los miembros de mayor tamaño dentro de la familia de los córvidos, aunque su tamaño puede variar en comparación con sus congéneres. Es común encontrar al cuervo de cuello marrón en regiones desérticas que se extienden por el norte de África, Kenia, la Península Arábiga, el Gran Oriente Medio y el sur de Irán.
En cuanto a su alimentación, esta ave no es exigente. Su dieta abarca carroña, serpientes, langostas, peces, granos y frutas. Para anidar, el cuervo de cuello marrón muestra una gran adaptabilidad. Construye nidos en árboles, acantilados e incluso en edificios antiguos. Generalmente, un nido contiene una puesta de 4 a 5 huevos.
Sus vocalizaciones son bastante similares a las del cuervo común. Es posible escuchar graznidos y sonidos como "karr-karr-karr" y "kuerk-kuerk". De manera curiosa, pueden imitar otros sonidos, aunque esta habilidad se observa con menor frecuencia en estado salvaje.