Hechos sobre: Ailuroedus crassirostris
El catbird verde es una especie singular de ave jardinería que habita en los bosques subtropicales a lo largo de la costa este de Australia. Su distintivo llamado, que recuerda tanto al maullido de un gato como al llanto de un niño, es uno de sus rasgos más característicos. Con su plumaje verde esmeralda adornado con manchas blancas, picos robustos y patas fuertes, estas aves son un espectáculo digno de admirar. Curiosamente, machos y hembras presentan un aspecto similar, lo que dificulta diferenciarlos. Sus llamadas pueden variar desde cortas y agudas hasta largas y temblorosas.
Los catbirds verdes se encuentran en selvas subtropicales y templadas, bosques de melaleuca y, ocasionalmente, en bosques de eucaliptos. Su territorio generalmente abarca aproximadamente cinco acres y prefieren reproducirse en áreas con árboles de higo. La temporada de reproducción va de octubre a enero, durante la cual construyen grandes nidos utilizando palos, hojas y zarcillos de enredaderas.
A diferencia de otras aves jardineras, los machos de catbird verde no construyen complejas pérgolas para atraer a las hembras. En su lugar, despejan pequeñas áreas de exhibición para captar su atención. Estas aves son monógamas, apareándose de por vida, y se sabe que el macho alimenta a la hembra durante todo el año. Las parejas reproductoras incluso realizan llamados a dúo. Una puesta típica consiste en 2-3 huevos, que la hembra incuba durante unos 23-24 días.
En cuanto a la alimentación, los catbirds verdes tienen una dieta variada que incluye frutas, brotes, flores, semillas, insectos y pequeños vertebrados. Forrajean activamente en los árboles, moviéndose con gracia de rama en rama. Aunque actualmente están catalogados como Preocupación Menor en la Lista Roja de la UICN, se consideran Vulnerables en Nueva Gales del Sur debido a la continua destrucción de su hábitat por la tala de bosques para el desarrollo.
Socialmente, los catbirds verdes a menudo se ven en parejas o pequeños grupos. Son territoriales, especialmente durante las temporadas de reproducción, y a veces comparten áreas de alimentación con otras especies como las aves jardineras satinadas y las aves de higo. Pasan gran parte de su tiempo buscando comida y vigilando sus territorios. A pesar de ser relativamente comunes en sus hábitats, la amenaza constante de la pérdida de hábitat representa un riesgo significativo para su futuro.