Hechos sobre: Alectura lathami
El pavo de matorral australiano, también conocido como gweela, pavo de matorral o pavo de monte, es una especie de ave común que se encuentra en el este de Australia. Es el miembro vivo más grande de la familia Megapodiidae y una de las tres especies que habitan en Australia. A pesar de su nombre, el pavo de matorral australiano no está estrechamente relacionado con los pavos americanos ni con el avutarda australiano.
Estas aves son bastante distintivas debido a su gran tamaño, plumas negras, cabezas rojas y colas en forma de abanico. Uno de sus rasgos más interesantes es su método de anidación. Los machos construyen enormes montículos en el suelo utilizando hojas, materiales compostables y tierra. Estos nidos sirven como un lugar para el apareamiento y la puesta de huevos. El calor generado por los materiales en descomposición en el montículo incuba los huevos, que son de gran tamaño. Los machos son responsables de construir y mantener estos nidos, mientras que las hembras ponen los huevos.
Se pueden encontrar pavos de matorral australianos en una variedad de hábitats, incluyendo selvas tropicales, bosques húmedos de esclerófilas, matorrales más secos y áreas abiertas. Tampoco son tímidos en los entornos urbanos y a menudo se los ve en los patios traseros de ciudades como Brisbane y Sídney.
En cuanto a la alimentación, los pavos de matorral no son exigentes. Se alimentan de insectos, semillas y frutas caídas, que encuentran rascando la hojarasca o rompiendo troncos podridos con sus grandes pies. Sin embargo, este comportamiento de forrajeo a veces puede causar daños a jardines y cultivos, lo que lleva a diversas estrategias de manejo en áreas urbanas.
Históricamente, estas aves y sus huevos han sido cazados para la alimentación, incluyendo por los aborígenes australianos tradicionales. Hoy en día, el pavo de matorral australiano está protegido en Queensland y Nueva Gales del Sur, con multas y sanciones estrictas por dañarlos o cazarlos. Los esfuerzos de conservación y la protección de su hábitat natural son cruciales para asegurar que estas aves únicas continúen prosperando.