Hechos sobre: Amytornis goyderi
El maluro de Eyre, conocido científicamente como Amytornis goyderi, es un pequeño ave bien camuflado de la familia Maluridae. Este pájaro es endémico de las regiones áridas de Australia Central y fue descubierto por primera vez por F. W. Andrews en 1874, cerca del río Macumba en el lago Eyre. Su nombre rinde homenaje a George Woodroffe Goyder, el Agrimensor General de Australia del Sur.
Este maluro es el más pequeño de su género, midiendo entre 14 y 16,5 cm de longitud. Existen pequeñas diferencias entre machos y hembras, así como entre diferentes poblaciones.
El maluro de Eyre habita principalmente en los campos de dunas de los desiertos Simpson y Strzelecki en Australia Central, específicamente en Australia del Sur, el suroeste de Queensland y el Territorio del Norte. Prefiere hábitats con matas de hierba ciperácea en las crestas y pendientes de las dunas, así como áreas con hierba de lanza y spinifex.
En términos de comportamiento, se cree que el maluro de Eyre es sedentario, permaneciendo en la misma área durante todo el año. Se le observa solo, en parejas o en pequeños grupos. Tiende a permanecer oculto dentro de la vegetación y se desplaza de una manera distintiva, "mitad corriendo, mitad volando". Su dieta consiste en una mezcla de plantas e invertebrados, que encuentra saltando entre los grupos de vegetación.
Los hábitos de reproducción del maluro de Eyre no están bien documentados. Sin embargo, se han encontrado nidos con huevos y polluelos entre julio y septiembre. Tanto los machos como las hembras emiten cantos distintivos, que se cree que ayudan en la demarcación del territorio y la cohesión del grupo.
Los esfuerzos de conservación para el maluro de Eyre se centran en proteger su hábitat, particularmente las áreas de hierba ciperácea en las dunas. Los animales de pastoreo representan una amenaza significativa para estos hábitats, por lo que mantener su calidad es crucial.
La historia del descubrimiento del maluro de Eyre se remonta al siglo XIX, con hallazgos iniciales e investigaciones posteriores que nos ayudan a entender este pájaro único. A pesar de su naturaleza esquiva y hábitat remoto, se están realizando esfuerzos continuos para estudiar y conservar la población del maluro de Eyre.