Hechos sobre: Calyptorhynchus latirostris
La cacatúa negra de Carnaby, también conocida como la cacatúa negra de pico corto, es una ave llamativa nativa del suroeste de Australia. Descrita por primera vez por el naturalista Ivan Carnaby en 1948, estas impresionantes aves miden entre 53 y 58 cm de longitud. Son fácilmente reconocibles por sus plumas de color gris-negro, parches blancos en las mejillas y una distintiva banda blanca en la cola. Curiosamente, se pueden diferenciar los machos de las hembras por el color de sus picos y anillos oculares.
En cuanto a la reproducción, estas cacatúas suelen poner uno o dos huevos por nidada. Los huevos tardan entre 28 y 29 días en eclosionar, y los polluelos abandonan el nido después de diez a once semanas. Las aves jóvenes permanecen con sus padres hasta la siguiente temporada de cría.
Desafortunadamente, la cacatúa negra de Carnaby es una especie en peligro de extinción. La principal razón de su declive es la pérdida de hábitat debido a la limpieza de tierras y el desarrollo urbano. Tanto el gobierno australiano como la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) las han catalogado como en peligro.
En términos de clasificación, la cacatúa negra de Carnaby se agrupaba anteriormente con la cacatúa negra de Baudin bajo el nombre de cacatúa negra de cola blanca. Sin embargo, ahora se consideran especies separadas dentro del subgénero Zanda. Estas aves se alimentan principalmente de semillas de plantas como Banksia y Eucalyptus. Anidan en los huecos de grandes árboles, los cuales son cada vez más difíciles de encontrar debido a la destrucción del hábitat.
Las amenazas a las que se enfrenta la cacatúa negra de Carnaby son múltiples, incluyendo la destrucción del hábitat, la competencia por sitios de anidación y la caza furtiva. Se están llevando a cabo esfuerzos de conservación para ayudar a proteger a estas aves. Iniciativas como el Great Cocky Count monitorean los números de población, y se están implementando estrategias para salvaguardar sus hábitats restantes. Estos esfuerzos son vitales, ya que la especie también enfrenta desafíos como brotes de enfermedades, eventos climáticos severos y peligros en las carreteras.
La cacatúa negra de Carnaby está protegida bajo la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas (CITES), que ofrece protección legal contra el comercio y la explotación. Estas medidas de conservación son cruciales para asegurar la supervivencia de esta hermosa y única ave.