Hechos sobre: Manorina melanocephala
El "noisy miner" es un ave nativa del este y sureste de Australia, perteneciente a la familia de los mieleros. Se reconoce fácilmente por su cuerpo gris, cabeza negra, pico y patas de color naranja-amarillo, y un parche amarillo detrás de su ojo. Estas aves no solo son visualmente distintivas; también son conocidas por ser bastante ruidosas, con una amplia gama de vocalizaciones. Viven en grandes colonias, a veces con cientos de individuos, y prefieren los bosques de eucaliptos secos y abiertos sin muchos arbustos. Curiosamente, su número ha aumentado en áreas con mucha actividad humana.
Los "noisy miners" son criaturas sociales y muy territoriales. Forman grupos y alianzas estrechas dentro de sus colonias. Para mantener estos grupos unidos, realizan varias exhibiciones, incluyendo patrones de vuelo únicos, posturas corporales y expresiones faciales. Estas aves también son bastante agresivas, a menudo persiguiendo, peleando y acosando tanto a intrusos como a otros miembros de la colonia.
En cuanto a la alimentación, los "noisy miners" tienen una dieta variada que incluye néctar, frutas e insectos. Buscan comida en el dosel, en los troncos y ramas de los árboles, e incluso en el suelo. Se han adaptado bien a los paisajes alterados por los humanos, especialmente en áreas con mucho espacio abierto y árboles de eucalipto. Se reproducen durante todo el año, y los jóvenes reciben cuidados comunales. Durante la temporada de reproducción, a menudo lidian con depredadores de nidos y participan en comportamientos de alimentación y defensa comunales para proteger sus nidos.
Los esfuerzos de conservación para el "noisy miner" se centran principalmente en gestionar su impacto en otras especies de aves, ya que su gran número puede ser una amenaza para la diversidad aviar. Las estrategias incluyen modificar proyectos de restauración de hábitats para prevenir la dominancia de los noisy miners y, en algunos casos, considerar la eliminación selectiva. La translocación ha demostrado ser ineficaz debido a su fuerte naturaleza territorial. Aunque son una especie protegida en Australia, se ha sugerido la eliminación selectiva como una forma de reducir su número y ayudar a restaurar el equilibrio ecológico en las áreas afectadas.