Hechos sobre: Jacana spinosa
La jacana norteña, también conocida como jacana norteña, es un ave zancuda fascinante que se puede encontrar en la costa de México, el oeste de Panamá, Cuba, Jamaica y La Española. Ocasionalmente, incluso se reproduce en Texas y ha sido avistada hasta en Arizona. Las jacanas son notables por sus grandes patas y garras, que les permiten desplazarse con facilidad sobre plantas flotantes en lagos poco profundos. Estas aves se encuentran en regiones tropicales de todo el mundo.
En cuanto a su apariencia, la jacana norteña presenta un cuerpo de color marrón oscuro con una llamativa cabeza y cuello negros. Además, tiene manchas amarillas en el pico y una carúncula amarilla en la frente. Curiosamente, la hembra es más grande que el macho. Las aves jóvenes tienen marcas distintivas, mientras que los polluelos mayores son grises con partes superiores marrones.
Estas aves prefieren habitar áreas costeras, especialmente sobre vegetación flotante en pantanos, marismas y estanques. Su dieta es bastante variada, incluyendo insectos, lirios acuáticos, caracoles, gusanos, pequeños cangrejos, peces, moluscos y semillas. Uno de los aspectos más interesantes de las jacanas norteñas es su sistema de apareamiento poliándrico, en el que una hembra tiene múltiples compañeros machos. Los machos son los encargados de construir nidos flotantes y cuidar de los huevos, mientras que las hembras se ocupan de defender su territorio y ahuyentar a los depredadores.
En términos de amenazas, las jacanas deben protegerse de serpientes, caimanes, tortugas mordedoras y diversas aves y mamíferos de gran tamaño. Utilizan vocalizaciones para comunicarse con sus compañeros, sus polluelos y para repeler amenazas. Aunque la jacana norteña es generalmente común en su área de distribución, es importante señalar que podrían volverse vulnerables si sus hábitats de humedales se pierden.