Hechos sobre: Lynx canadensis
El lince canadiense es un felino de tamaño mediano nativo de América del Norte, fácilmente identificable por su pelaje largo y denso, orejas triangulares con mechones negros y patas anchas, similares a raquetas de nieve. Este felino tiene una marcada preferencia por las liebres americanas, que juegan un papel crucial en su dieta, creando una relación cíclica depredador-presa. Principalmente activo durante el crepúsculo o la noche, el lince emplea tácticas de emboscada para capturar a su presa. Es una criatura solitaria que interactúa con otros principalmente durante la temporada de apareamiento o mientras cuida a sus crías. Generalmente, se encuentra al lince canadiense en bosques boreales y actualmente está catalogado como de Preocupación Menor en la Lista Roja de la UICN, lo que indica que su población es estable sin amenazas significativas.
Respecto a su clasificación, el lince canadiense fue descrito por primera vez por Robert Kerr en 1792. Su taxonomía ha sido objeto de debate a lo largo de los años, pero se acepta generalmente como una especie distinta dentro del género Lynx, que también incluye al lince rojo y al lince euroasiático. Aunque se han propuesto tres subespecies, su validez es cuestionada debido a las mínimas diferencias en su apariencia física y composición genética.
Físicamente, el lince canadiense está bien adaptado a su entorno. Posee un pelaje largo y grueso, garras retráctiles y patas grandes y anchas que le facilitan moverse por paisajes nevados. Su dieta consiste principalmente en liebres americanas, aunque ocasionalmente consume otros pequeños mamíferos. Los hábitos reproductivos del lince están estrechamente relacionados con la disponibilidad de presas, y las hembras dan a luz de uno a ocho cachorros tras un período de gestación de dos a tres meses.
Las interacciones humanas con los linces canadienses implican principalmente su captura por su pelaje en Alaska y Canadá. Las regulaciones de caza, incluidas las temporadas y las cuotas, se basan en datos poblacionales para garantizar prácticas sostenibles. En los Estados Unidos contiguos, la pérdida de hábitat representa una amenaza significativa, y también ha habido casos de hibridación con linces rojos. Se están llevando a cabo esfuerzos de conservación para proteger las poblaciones de linces, incluyendo programas exitosos de reintroducción en algunas áreas.