Hechos sobre: San Diego
El galeón San Diego, originalmente conocido como San Antonio, inició su vida como un barco mercante antes de ser reconvertido en un buque de guerra para la Armada Española. En 1600, se enfrentó al barco holandés Mauricio cerca de las Filipinas. Desafortunadamente, debido al peso de los cañones a bordo, el San Diego no pudo contraatacar de manera efectiva y terminó hundiéndose. Se informó que los sobrevivientes del naufragio fueron atacados por la tripulación holandesa.
Avancemos hasta 1992, cuando el arqueólogo submarino francés Franck Goddio descubrió el naufragio del San Diego. Este hallazgo extraordinario llevó a la recuperación de 34,407 artefactos, incluyendo porcelana china, katanas japonesas, cañones portugueses y monedas mexicanas. Estos tesoros fueron exhibidos inicialmente alrededor del mundo antes de encontrar hogares permanentes en el Museo Nacional de Antropología en Manila y el Museo Naval en Madrid.
La historia del San Diego está profundamente ligada a su transformación en un buque de guerra bajo las órdenes de Don Antonio de Morga, el Vicegobernador General de las Filipinas. A pesar de contar con una tripulación más grande y mayor poder de fuego, el diseño defectuoso del barco causó su hundimiento durante la batalla con el Mauricio.
Descubrir el naufragio no fue tarea fácil; requirió una extensa investigación y exploración submarina. El proceso de recuperación fue meticuloso, produciendo una abundante cantidad de materiales arqueológicos como cerámicas, jarras de gres, partes de katanas, cañones, mosquetes, instrumentos de navegación y monedas.
Para preservar estos artefactos, los conservadores emplearon técnicas como la desalinización, limpieza química y estabilización. La fascinante historia del San Diego y sus tesoros fue capturada en un documental titulado "Die Schätze der San Diego – Tauchfahrt in die Vergangenheit" que destaca los hallazgos arqueológicos sobresalientes del naufragio.