Hechos sobre: Magdalena
La magdalena, también conocida como petite madeleine, es un encantador pastel pequeño originario de Commercy y Liverdun, en la región de Lorena, Francia. Estos delicados pasteles son reconocidos por su forma característica de concha, que se obtiene al hornearlos en moldes específicos. Las magdalenas se preparan típicamente con masa de pastel génoise, lo que les confiere una textura ligera y esponjosa. Las recetas tradicionales a menudo incluyen un toque de frutos secos finamente molidos, como almendras, o un toque de ralladura de limón para un sabor cítrico refrescante.
Los orígenes de las magdalenas están envueltos en varias leyendas. Algunos dicen que fueron creadas por Madeleine Paulmier, una cocinera del duque de Lorena, Estanislao I, mientras que otros atribuyen su invención a un pastelero del siglo XIX llamado Jean Avice. El término "magdalena" apareció por primera vez en Francia en el siglo XVIII, y estos pasteles alcanzaron éxito comercial a principios del siglo XIX. Para finales de 1800, las magdalenas se habían convertido en un alimento básico en la dieta de la burguesía francesa. En 2006, fueron elegidas para representar a Francia en la iniciativa Café Europa.
Las magdalenas también ocupan un lugar especial en la literatura, gracias a "En busca del tiempo perdido" de Marcel Proust. En esta famosa obra, las magdalenas simbolizan la memoria involuntaria. Cuando el narrador prueba una magdalena mojada en té, es invadido por una avalancha de recuerdos, mostrando el profundo impacto que las experiencias sensoriales pueden tener en nuestras remembranzas.