Hechos sobre: Butterscotch
El caramelo de azúcar moreno es un exquisito manjar hecho principalmente de azúcar moreno y mantequilla, con la ocasional adición de ingredientes como jarabe de maíz, crema, vainilla y sal. Aunque es similar al toffee, la diferencia principal radica en que el caramelo de azúcar moreno se hierve hasta alcanzar la etapa de "grieta blanda" (soft crack) y no hasta la etapa de "grieta dura" (hard crack).
Este dulce tiene una historia interesante, con Parkinson's de Doncaster frecuentemente acreditado por haberlo inventado y popularizado a mediados del siglo XIX. Uno de los deliciosos subproductos del caramelo de azúcar moreno es la salsa de caramelo, que combina caramelo con crema para crear una cobertura ideal para postres como los helados.
El término "butterscotch" no solo se refiere al caramelo en sí, sino también a la combinación de sabores de azúcar moreno y mantequilla. Este sabor se encuentra en varios dulces, como el pudín de caramelo. Los orígenes de la palabra "butterscotch" son debatidos, con teorías que la vinculan al corte, a Escocia o al quemado. Las menciones históricas rastrean el caramelo de azúcar moreno hasta Doncaster en Yorkshire, donde era vendido por confiteros a mediados del siglo XIX.
El caramelo de azúcar moreno no se limita únicamente a los dulces. Aromatiza una amplia gama de productos, incluidos salsas para postres, pudines, galletas y chispas para hornear. Incluso hay caramelos duros y licores con ese irresistible sabor a caramelo. Hacer salsa de caramelo es sencillo: cocina el azúcar moreno a 240°F (115°C), luego mézclalo con mantequilla y crema para obtener una cobertura rica y indulgente.
Ya sea disfrutado como salsa, pudín o caramelo, el caramelo de azúcar moreno sigue siendo un sabor amado que añade un toque de dulzura a muchos postres.