Hechos sobre: Almáciga
La mástique, a menudo denominada "lágrimas de Quíos" es una resina singular obtenida del árbol de mástique, que crece principalmente en la isla griega de Quíos. Esta resina se exuda de las glándulas del árbol y eventualmente se solidifica en fragmentos quebradizos y translúcidos. Al masticarse, la mástique se transforma en una goma opaca de color blanco brillante. Inicialmente, tiene un sabor amargo, pero pronto desarrolla un gusto refrescante que recuerda al pino y al cedro.
El uso de la mástique se remonta a más de 2,500 años en la antigua Grecia, donde se valoraba por sus beneficios medicinales y culinarios. Durante el dominio otomano de Quíos, la mástique era tan apreciada que robarla podía conllevar la pena de muerte. La producción de mástique implica una meticulosa cultivación, cosecha y limpieza, y la mástique de Quíos está protegida por una designación de origen de la Unión Europea.
En el Mediterráneo Oriental, la mástique es un ingrediente popular en la cocina y la repostería. Se utiliza para dar sabor a una variedad de platos y postres, incluyendo chicles, helados, salsas y bebidas. La mástique también tiene importancia religiosa, especialmente en los rituales cristianos ortodoxos, donde se emplea en aceites de unción.
Más allá de sus usos culinarios y religiosos, la mástique se emplea en barnices, perfumes, cosméticos e incienso. Debido a su rareza y costo, existen muchas imitaciones en el mercado, como otras resinas como el Boswellia o la goma arábiga. Sin embargo, la auténtica mástique de Quíos sigue siendo muy apreciada por sus propiedades distintivas y su rico trasfondo histórico.