Hechos sobre: Cystophora cristata
La foca capuchina es un fascinante mamífero marino habitante del Atlántico Norte central y occidental. Estas grandes focas son fáciles de identificar por sus pelajes de tonos gris plateado o blanco, adornados con manchas negras, y por las únicas vejigas inflables en las cabezas de los machos adultos.
En cuanto a su tamaño, los machos adultos de foca capuchina son más grandes que las hembras. Los machos miden típicamente alrededor de 2.6 metros de longitud y pesan entre 300 y 410 kg, mientras que las hembras miden aproximadamente 2.03 metros de longitud y pesan entre 145 y 300 kg.
Las focas capuchinas prefieren las aguas frías del Océano Ártico y el Atlántico Norte, frecuentemente alrededor del hielo flotante y en aguas profundas. Son conocidas por su estilo de vida migratorio, recorriendo largas distancias a través de estas frías regiones.
Su dieta es bastante variada, compuesta principalmente por crustáceos, kril, diferentes tipos de peces, calamares y otras criaturas marinas. Las focas capuchinas son impresionantes buceadoras, capaces de sumergirse a profundidades de más de 1,000 metros y permanecer bajo el agua por largos períodos.
Estas focas son generalmente solitarias, pero se agrupan durante las temporadas de reproducción y muda. En estos momentos, pueden ser bastante territoriales y agresivas. Una de las características más distintivas de los machos es su saco nasal inflable, usado para emitir sonidos y atraer a las hembras.
La reproducción tiene lugar en cuatro áreas principales. Las hembras de foca capuchina dan a luz a crías que miden alrededor de 1 metro de longitud y pesan aproximadamente 24 kg. Las crías tienen un período de lactancia muy corto de solo cuatro días, pero durante este tiempo, aumentan de peso rápidamente gracias a la leche rica en grasa de sus madres.
A pesar de su resistencia, las focas capuchinas enfrentan amenazas por la caza y la captura accidental en equipos de pesca. Para ayudar a protegerlas, se han implementado esfuerzos de conservación, incluyendo la Ley de Protección de Mamíferos Marinos de 1972, que ofrece protección legal a estos animales únicos.