Hechos sobre: Kuli-kuli
Kuli-kuli es un bocadillo muy apreciado en África Occidental, elaborado principalmente a base de cacahuetes. Sus orígenes se remontan al pueblo Nupe de dicha región y es ampliamente disfrutado en países como Nigeria, Benín, el norte de Camerún y Ghana. Este aperitivo crujiente puede consumirse solo o acompañado de garri (harina de yuca), azúcar y agua, una combinación conocida como "garri soakings", o servido junto a platos tradicionales como Hausa koko, fura y kamu. También se utiliza en ensaladas y en platos como Suya y Kilishi.
La preparación del kuli-kuli comienza asando y moliendo los cacahuetes hasta obtener una pasta llamada "Labu". Luego, esta pasta se mezcla con especias, sal, pimienta y, en ocasiones, un poco de azúcar. Para eliminar el exceso de aceite, la pasta se lava con agua antes de darle forma de bolas o cilindros. Agregar potasa durante la fritura ayuda a extraer más aceite, lo que prolonga la vida útil del kuli-kuli.
En Ghana, el kuli-kuli es un tentempié crujiente popular, con variaciones en los ingredientes y formas según la región. A menudo se encuentra en las comunidades Zongo y entre el pueblo Mole-Dagomba en las regiones septentrionales del país.
La producción de kuli-kuli tiene una importancia económica, especialmente para las mujeres que cultivan cacahuetes, extraen aceite, elaboran kuli-kuli y venden estos productos. Este bocadillo es rico en proteínas, magnesio, fósforo y vitamina E, aportando beneficios nutritivos.