Hechos sobre: Pottage
El potaje es una sopa o guiso sustancioso elaborado al hervir vegetales, granos y, en ocasiones, carne o pescado. Fue un alimento básico durante siglos, especialmente entre los siervos y campesinos en Europa desde el siglo IX hasta el XVII. Mientras que los ricos podían permitirse añadir carnes y otros ingredientes costosos a su potaje, la receta básica seguía siendo un plato común y esencial para muchos.
El plato eventualmente evolucionó en las sopas modernas que disfrutamos hoy, con variaciones regionales como el cawl galés. En Nigeria, los términos potaje y porridge a menudo se usan indistintamente. Estos platos son una parte fundamental de la cocina nigeriana, y suelen incluir ingredientes como ñame, tomates, vegetales y, ocasionalmente, pescado o carne.
La Biblia incluso hace referencia al potaje en la historia de Jacob y Esaú. Esaú vendió su primogenitura por un plato de "pan y potaje de lentejas", dando origen a la frase "un plato de lentejas", que significa un mal trato hecho por un beneficio a corto plazo a expensas de beneficios a largo plazo.
Históricamente, el potaje se cocía durante horas para asegurarse de que era seguro de comer y para lograr una textura suave y homogénea. Se solía servir con pan, lo que lo convertía en una comida completa y nutritiva.
Durante la Edad Media, los potajes espesos se elaboraban con cereales, carne y especias, mientras que las versiones más líquidas se conocían como "ronnyng". Un tipo popular era el frumenty, hecho con grano de trigo, leche y especias.
En la América colonial, el potaje siguió siendo un plato básico, mezclando tradiciones culinarias europeas y nativas americanas. El potaje nativo americano a menudo utilizaba maíz, mientras que los colonos ingleses lo preparaban con trigo, cebada, centeno o avena. Esta tradición culinaria evolucionó en clásicos de Nueva Inglaterra como los chowders y los frijoles horneados, incorporando diversos vegetales, carnes y granos.
Una variación única fue el succotash indígena, un tipo de potaje hecho con maíz y carne como venado, oso o pescado, espesado con nueces. Este plato ejemplifica la adaptabilidad y el atractivo perdurable del potaje a través de diferentes culturas y épocas.