Makówki

Makówki es un delicioso postre de pan dulce elaborado con semillas de amapola, originario de Europa Central. Este plato es especialmente valorado en Silesia, donde ocupa un lugar indispensable en la cena de Nochebuena. También se consume en otras regiones de Polonia, en el este de Alemania y en Hungría. Fuera de Silesia, recibe diferentes nombres: en Brandeburgo y Berlín se le conoce como Mohnpielen, mientras que en Hungría, un platillo similar preparado con rodajas de kifli se llama mákos guba. En ciudades polacas como Poznań y Łódź, donde muchos silesianos se trasladaron durante la Revolución Industrial del siglo XIX, se le llama makiełki.

Elaborar Makówki es una especie de arte. Se inicia con pan blanco dulce y semillas de amapola finamente molidas, las cuales se cuecen en leche con mantequilla. A esta base, se le añade una combinación de frutas secas, nueces, azúcar, miel, vainilla, canela y, en ocasiones, un toque de ron para intensificar su sabor. El pan se dispone en capas alternando con esta rica mezcla en una olla o recipiente, permitiendo que absorba todos los sabores. Tras colocar las capas, se adorna con más nueces y frutas y se deja enfriar durante varias horas antes de servirse.

En Silesia, Makówki es más que un postre; representa un símbolo de la herencia cultural, especialmente durante la temporada navideña y de Año Nuevo. La tradición de preparar y servir Makówki se mantiene viva y es una parte apreciada de la gastronomía silesiana. No obstante, fuera de Silesia, la preparación puede ser algo complicada, ya que las semillas de amapola finamente molidas son difíciles de encontrar. En Estados Unidos, algunas personas utilizan pasta de amapola enlatada como sustituto.

Ya sea que lo llames Makówki, Mohnpielen o makiełki, este dulce es una deliciosa manera de celebrar las fiestas y conectar con las tradiciones de Europa Central.