Hechos sobre: Chersina angulata
La tortuga angulada, comúnmente conocida como la tortuga "proa", es una especie fascinante originaria de Sudáfrica. Es el único miembro del género Chersina. Estas tortugas se identifican fácilmente por las distintivas "proas" debajo de sus barbillas, que utilizan durante disputas territoriales y rituales de apareamiento. Poseen un único escudo gular y presentan cinco garras en sus patas delanteras y cuatro en las traseras. Dependiendo de su ubicación, su coloración y tamaño pueden variar, con aquellas a lo largo de la costa oeste frecuentemente mostrando un tinte rojizo.
En su hábitat natural, las tortugas anguladas prosperan en los climas semiáridos y mediterráneos de Sudáfrica, particularmente en áreas de fynbos, karoo y matorrales costeros. Sin embargo, enfrentan numerosas amenazas, incluyendo depredadores como las mangostas y chacales, así como la destrucción del hábitat debido a actividades humanas. La recolección ilegal para el comercio de mascotas y los accidentes de tráfico también representan riesgos significativos para sus poblaciones.
Para proteger a estas tortugas, las leyes prohíben su extracción de la naturaleza sin un permiso. A pesar de esto, son mascotas populares en Sudáfrica, donde requieren una dieta variada de plantas nativas. Las tortugas criadas en cautiverio pueden obtenerse a través de un comercio de mascotas regulado, pero los propietarios deben asegurarse de proporcionar un entorno adecuado, incluyendo una dieta adecuada y protección contra peligros domésticos como perros y conflictos territoriales.
La tortuga angulada también está en riesgo por el comercio y exportación ilegales, razón por la cual están protegidas bajo regulaciones internacionales como CITES. Sacarlas de su hábitat natural puede perjudicar su salud debido a sus necesidades dietéticas y climáticas específicas. Por lo tanto, es crucial educar al público sobre los aspectos legales y las responsabilidades de la tenencia de mascotas para ayudar a conservar esta especie única.