Hechos sobre: Cairina moschata
El pato criollo es una ave acuática de gran tamaño, nativa de México, América Central y América del Sur. También existen poblaciones silvestres y ferales menores en países como Estados Unidos, Europa, Nueva Zelanda y Australia. Los machos de pato criollo son más grandes que las hembras, pudiendo pesar hasta 7 kilogramos. Estos patos presentan un plumaje mayormente negro y blanco, con los machos mostrando plumas brillantes e iridiscentes en sus espaldas. Son bastante resistentes y pueden soportar temperaturas frías de hasta -12°C.
La versión domesticada, conocida como *Cairina moschata domestica*, ha sido criada desde tiempos precolombinos por los pueblos indígenas. Estos patos domesticados son más pesados y no vuelan tan bien como sus contrapartes silvestres. Los patos criollos tienen largas garras en sus patas y colas anchas y planas. Los patos criollos salvajes son mayormente negros con grandes manchas blancas en sus alas. Fueron descritos por primera vez por Carl Linnaeus en 1758 y ahora se clasifican bajo la subfamilia de los patos de superficie, *Anatinae*.
Estos patos no migran y usualmente se encuentran en pantanos boscosos, lagos y arroyos. Su dieta es variada e incluye plantas, peces pequeños, anfibios e insectos. En cuanto a la reproducción, ponen entre 8 y 16 huevos, que tardan alrededor de 35 días en incubar. Los patitos son bastante independientes y se alimentan de granos, insectos y hierba desde el principio. En áreas urbanas y suburbanas, los patos criollos ferales a veces pueden convertirse en una molestia.
Los patos criollos domesticados, a menudo denominados "patos de Berbería", han sido criados por su carne, que tiene un sabor más intenso en comparación con otros patos domésticos. También son más silenciosos. Estos patos pueden cruzarse con los ánades reales para producir híbridos como el pato mulard. Su carne es magra y tierna, a menudo comparada con la ternera, y también se utiliza en la producción de foie gras.
Curiosamente, los patos criollos se emplean en tratamientos homeopáticos y a veces se cruzan con ánades reales para producir productos de pato kosher en Israel. El estado kosher de los patos criollos ha generado algunos debates rabínicos. Los estudios han demostrado que los patos criollos son más propensos a los parásitos sanguíneos que otras especies de aves.