Hechos sobre: Lukanka
Lukanka es un salami búlgaro muy apreciado que destaca en la gastronomía de Bulgaria. Se asemeja al sujuk, aunque ofrece un sabor más intenso. Este salami semi-seco presenta una forma cilíndrica aplanada característica, con un interior de color marrón rojizo cubierto por una capa fúngica blanca. Su interior, constituido por pequeños trozos de carne y grasa, posee una textura granulada inconfundible.
La receta tradicional de la lukanka incluye una mezcla de cerdo, ternera y especias como pimienta negra, comino y sal. Estos ingredientes se pican finamente y se embuten en una tripa seca de vaca. Posteriormente, el salami se deja secar durante 40 a 50 días en un espacio bien ventilado, donde se prensa para lograr su característica forma plana. Una vez terminado, la lukanka suele cortarse en rodajas finas y servirse fría como aperitivo.
El sabor de la lukanka puede variar dependiendo de la región donde se fabrique, ya que está influenciado por la microflora local. Varias zonas de Bulgaria son especialmente conocidas por producir lukanka de alta calidad, en particular el centro del país, a los pies de la cordillera de los Balcanes. Regiones destacadas incluyen Smyadovo, Panagyurishte y Karlovo. La "Karlovska lukanka" de Karlovo cuenta con una denominación de origen protegida localmente, mientras que la "Lukanka panagyurska" de Panagyurishte ha obtenido la distinción de Especialidad Tradicional Garantizada (ETG) en toda la Unión Europea.