Hechos sobre: Fideos chinos
Los fideos son una piedra angular de la cocina china, con variedades diversas que varían según la región, los ingredientes, la forma y los métodos de preparación. Son fundamentales en los platos regionales chinos y también destacan en las escenas culinarias de Singapur y otros países con comunidades chinas significativas. La influencia de los fideos chinos se extiende más allá de China, impactando las cocinas de países vecinos del este de Asia, como Corea y Japón, así como naciones del sudeste asiático como Vietnam, Camboya y Tailandia.
Nombrar los fideos chinos puede ser complicado debido a la gran cantidad de tipos, cada uno con su propio nombre en diferentes dialectos chinos. Los fideos han existido desde tiempos antiguos y se convirtieron en un alimento básico durante la dinastía Han. Suelen hacerse de harina de trigo, harina de arroz o almidón de frijol mungo. Las variaciones pueden incluir huevo, lejía o cereales para agregar color y sabor. Tradicionalmente, hacer fideos implicaba mucho trabajo manual, pero las máquinas automáticas de fideos, introducidas en la década de 1950, han agilizado el proceso.
Los fideos chinos pueden cocinarse frescos o secos, y pueden hervirse, saltearse o servirse en sopas con diversos ingredientes. Los fideos de trigo generalmente contienen sal y se cocinan rápidamente, mientras que los fideos de arroz o almidón de frijol mungo no contienen sal. Los principales tipos de fideos chinos incluyen fideos de trigo, de agua con lejía o huevo, de arroz, de almidón y de avena, cada uno con su textura y sabor únicos.
Hay innumerables platos deliciosos de fideos chinos, como Ban Mian, Beef Chow Fun, Char Kway Teow y Zhajiangmian, cada uno usando diferentes tipos de fideos. Con una rica historia e increíble versatilidad, los fideos chinos siguen siendo una parte vital de la cocina asiática.