Hechos sobre: Japanese kitchen
La cocina japonesa tiene una historia fascinante que ha evolucionado significativamente a lo largo de los siglos. En tiempos antiguos, las cocinas, conocidas como "kamado", eran verdaderamente el corazón del hogar. Las configuraciones iniciales eran bastante rudimentarias, comenzando con hoyos poco profundos y evolucionando hacia jarrones de barro y estructuras más complejas. Para el período Nara, las cocinas ya incorporaban herramientas esenciales como ollas de hierro, estufas, cestas y recipientes de barro.
Durante el período Heian, comenzó a tomar forma la idea de un área de despensa separada, haciendo las cocinas más especializadas. Para el período Kamakura, las cocinas a menudo se construían como estructuras separadas para reducir el riesgo de incendio. El período Muromachi introdujo estufas con múltiples hornillos, y para el período Edo, la clase alta disfrutaba de estufas más grandes y sofisticadas.
Las características de agua llegaron más tarde a las cocinas, comenzando con pozos y sistemas de filtración durante el período Yayoi. Con el tiempo, las cocinas comenzaron a incluir fregaderos, escurridores y recipientes de almacenamiento de agua. La combinación de fuego y agua en el diseño de la cocina marcó una evolución significativa durante el período Shoinzukuri.
La era industrial trajo aún más cambios. La introducción del gas y la electricidad revolucionó la cocina y llevó a la creación de nuevos electrodomésticos. Después de la Segunda Guerra Mundial, electrodomésticos eléctricos como refrigeradores y lavadoras se hicieron comunes en los hogares japoneses.
Las cocinas japonesas de hoy en día son elegantes y modernas, con encimeras, fregaderos, armarios, refrigeradores, estufas, microondas y campanas extractoras. Sin embargo, los hornos grandes y los lavavajillas todavía son poco comunes. El diseño de la cocina japonesa prioriza la eficiencia y la funcionalidad, fusionando elementos tradicionales y modernos de manera armoniosa.