Hechos sobre: Moorkop
Un moorkop es un exquisito pastel que comienza con un profiterol, un pequeño choux redondo. Este delicado bocadito se rellena hasta el borde con una rica crema batida. ¡Pero la magia no termina ahí! El profiterol se cubre generosamente con un glaseado de chocolate blanco o negro, agregando un toque intenso y dulce. Para hacerlo aún más irresistible, a menudo se adorna con una porción adicional de crema batida y una rodaja de mandarina o piña en la parte superior. El resultado es una combinación celestial de sabores cremosos, dulces y afrutados, todo envuelto en una cobertura de masa choux ligera y aireada. ¡No es de extrañar que este postre sea un favorito entre los amantes de los dulces!