Hechos sobre: Queso Leyden
El queso de Leyden, o "Leidse kaas" en neerlandés, es un exquisito queso semiduro de los Países Bajos, reconocido por su sabor distintivo gracias a las semillas de comino y alcaravea. Elaborado principalmente con leche de vaca, se produce tanto en fábricas como en granjas, especialmente en los alrededores de Leiden. Este queso pertenece a la categoría de "komijnekaas", una variedad que incorpora el comino como ingrediente principal.
El queso de Leyden tiene una forma característica: redonda y plana, similar al Gouda, pero con bordes más agudos en uno de sus lados. Típicamente, tiene un contenido de grasa de entre el 30% y el 40%, y su peso oscila entre los 3 kg (6.6 lb) y los 9 kg (20 lb).
El proceso de elaboración del queso es bastante detallado. En las granjas, se añade aproximadamente un 5% de suero de mantequilla a la leche. La mezcla se coagula con cuajo a una temperatura específica, se corta en grumos, se agita y se mezcla con las semillas de comino. Luego, los grumos se colocan en moldes forrados con tela, se prensan, se salan y finalmente se curan en una bodega fresca y húmeda. La versión tradicional, conocida como "Boeren-Leidse met sleutels" cuenta con el estatus de Denominación de Origen Protegida. El término "met sleutels" (con llaves) hace referencia al escudo de armas de Leiden, que presenta un par de llaves cruzadas.
Históricamente, las granjas en los Países Bajos se centraban en la producción de mantequilla para los mercados locales, lo que dejaba leche semidesnatada como subproducto. Esta leche era perfecta para elaborar un queso bajo en grasa que se conservaba mejor que los quesos de crema completa, como el Gouda, especialmente en climas más cálidos. Los agricultores de Leiden comenzaron a añadir semillas de comino y usaron achiote para la coloración, dándole al queso su distintivo tono rojo.
El queso de Leyden generalmente contiene un 40.6% de humedad, un 13.5% de grasa y un 37.3% de proteína. Es un queso único y sabroso con una rica historia y métodos de producción tradicionales, lo que lo convierte en una verdadera joya de la gastronomía neerlandesa.