Hechos sobre: Swiss chocolate
El chocolate suizo es mundialmente reconocido por su calidad excepcional y, aunque los ingredientes como los granos de cacao y el azúcar pueden provenir de otros lugares, la "magia" ocurre enteramente en Suiza. El país ha construido una reputación estelar con varias marcas famosas. En cuanto al chocolate con leche, Suiza es pionera. De hecho, el primer chocolate con leche sólido fue creado en 1875 por el confitero suizo Daniel Peter, quien utilizó leche condensada inventada por Henri Nestlé.
La historia del chocolate suizo se remonta al siglo XVII, y experimentó grandes avances en los siglos XVIII y XIX. Durante este período, se fundaron varias fábricas de chocolate icónicas, incluidas Cailler, Favarger, Suchard, Kohler, Sprüngli, Maestrani, Lindt, Frey, Tobler y otras. El chocolate suizo comenzó a ganar reconocimiento internacional en la segunda mitad del siglo XIX, gracias a innovaciones como el chocolate con leche y el proceso de conchado.
Aunque la industria del chocolate suizo siempre se ha orientado hacia las exportaciones, la Segunda Guerra Mundial trajo consigo restricciones comerciales que llevaron a un cambio hacia la externalización de la producción. Hoy en día, la mayor parte del chocolate suizo se disfruta en su propio país, con Suiza ostentando el mayor consumo per cápita de chocolate en el mundo. Por ejemplo, en 2004, Suiza produjo 148,270 toneladas de chocolate, con una buena parte exportada a países como Alemania, Francia, Gran Bretaña y América del Norte.
La industria del chocolate suizo está bien organizada, con grupos como Chocosuisse y la Convención Chocolatière Suisse dedicados a salvaguardar los intereses de los productores y a mantener estándares de calidad de primera clase. Con su rica historia y su compromiso inquebrantable con la excelencia, el chocolate suizo sigue siendo un referente en el mercado global.