Hechos sobre: Harissa
La harissa es una pasta picante de pimientos originaria de Túnez. Se elabora con pimientos rojos asados y pimientos Baklouti o serrano, mezclados con diversas especias y hierbas como ajo, semillas de alcaravea, cilantro, comino y aceite de oliva. Incluso existe una variante especial llamada harissa de rosa, que incluye pétalos de rosa para un toque distintivo.
Los pimientos empleados en la harissa probablemente llegaron a la cocina magrebí durante la ocupación española de Túnez entre 1535 y 1574. Hoy en día, la harissa es un ingrediente fundamental en la cocina tunecina, aportando picor y sabor a platos como guisos, cuscús y lablabi (una sopa de garbanzos). Túnez es un gran productor de harissa, y los niveles de picante pueden variar según la región donde se cultiven los pimientos.
En Argelia, la harissa es una adición común en sopas, guisos y cuscús. También se utiliza como adobo para carnes y berenjenas. La provincia de Annaba en Argelia es particularmente reconocida por su producción y consumo de harissa. En Marruecos, la harissa ha encontrado su lugar como condimento para los tajines.
La harissa tunecina no solo es popular a nivel local; también es una exportación significativa. En Israel, es un aderezo preferido para platos como sabich y shawarma, a menudo acompañada de otras salsas picantes como sahawiq y amba.
También existe una versión judía libia de salsa de chile llamada filfel chuma, o pilpelshuma. Esta salsa es similar a la harissa, pero se prepara con pimientos dulces y picantes en polvo, ajo machacado, semillas de alcaravea, comino, jugo de limón y sal. El filfel chuma es versátil y se utiliza tanto como condimento como ingrediente en una variedad de platos como ensaladas, carnes, pescados, legumbres, arroz y platos con huevo como shakshouka.