Marruecos Animales

Marruecos, una tierra de contrastes donde se entrelazan el desierto del Sahara, las montañas del Atlas y las costas del Atlántico y Mediterráneo, alberga una biodiversidad tan rica como sus paisajes. Este país norteafricano es el hogar de una variedad de especies animales que reflejan la singularidad de su entorno natural. Desde los majestuosos mamíferos hasta las aves más exóticas, Marruecos ofrece un espectáculo de vida silvestre que cautiva tanto a los aficionados a la naturaleza como a los viajeros curiosos.

Adentrémonos en el reino animal que habita en Marruecos. Aquí, el imponente león del Atlas ya no ruge, pero aún podemos encontrar al ágil zorro del desierto, que se desliza entre las dunas, y al macaco de Berbería, único primate aparte del ser humano que vive libre en Europa y que en Marruecos encuentra uno de sus últimos refugios. Las aves también juegan un papel protagónico en este mosaico natural, con especies como el flamenco que adornan con su presencia las aguas salinas de las marismas y el águila real que surca los cielos de las altas cumbres. Acompáñanos en un recorrido por la fascinante fauna que aún hoy día puebla los rincones más emblemáticos de Marruecos.

Mamíferos de Marruecos

En las tierras de Marruecos, el reino de los mamíferos está representado por criaturas tan emblemáticas como el macaco de Berbería, único primate aparte del ser humano que se encuentra en Europa y el norte de África. En las vastas extensiones del Sahara marroquí, se puede avistar al fennec, el zorro del desierto con sus distintivas orejas grandes. Los montes Atlas son el refugio del majestuoso leopardo del Atlas, aunque es extremadamente raro y en peligro de extinción. En las llanuras y bosques, el jabalí y el gato montés coexisten, mientras que en las costas, los delfines mulares surcan las aguas, ofreciendo un espectáculo natural a los visitantes.

Aves de Marruecos

En Marruecos, el reino de las aves es tan diverso como fascinante, albergando especies como el majestuoso águila real, que surca los cielos del Atlas con su envergadura imponente. Los humedales y las costas son el hogar del flamenco rosa, cuyo colorido plumaje adorna las aguas someras. En las regiones desérticas, el corredor sahariano se desliza entre las dunas, perfectamente adaptado a su entorno árido. Los bosques de cedros y robles albergan al piquituerto, un ave con un pico distintivamente curvado, ideal para extraer semillas de conos. Para el observador atento, Marruecos ofrece un espectáculo ornitológico de inigualable belleza y variedad.

Reptiles