Hechos sobre: Česnica
Una česnica, también conocida como Božićna pogača, es un pan redondo especial que desempeña un papel significativo en las tradiciones navideñas serbias. Este pan no es común; se prepara siguiendo reglas y rituales específicos que aumentan su importancia ceremonial. Una de las tradiciones clave implica colocar una moneda en la masa durante el amasado. A veces, también se añaden otros pequeños objetos. Antes de que comience la cena de Navidad, la česnica se rota en sentido antihorario tres veces y luego se rompe en pedazos que se comparten entre los miembros de la familia. Se cree que quien encuentra la moneda en su pedazo será bendecido con buena suerte para el año venidero.
El proceso de hacer česnica normalmente comienza con harina de trigo, y generalmente se hornea en la víspera de Navidad o temprano en la mañana de Navidad por el jefe de la familia o la mujer de la casa. En algunas regiones, el agua utilizada para la masa se recoge antes del amanecer en el día de Navidad de un manantial o pozo, ya que se cree que esta agua tiene propiedades especiales. A menudo hay reglas adicionales, como usar harina de un saco lleno o bañarse antes de comenzar a hacer el pan. En algunos lugares, también se incluyen en la masa pequeños objetos como figuras talladas, granos o ramitas, y se pueden inscribir símbolos en el pan antes de hornearlo.
En Vojvodina, la česnica toma la forma de un pastel hecho de capas de masa filo rellenas con nueces, pasas y miel, con una moneda escondida entre las capas. La cena de Navidad, que generalmente comienza alrededor del mediodía, es una celebración festiva marcada por rituales como hacer la Señal de la Cruz, encender una vela y decir oraciones. La česnica se rompe y se distribuye entre los miembros de la familia, reservándose piezas también para parientes ausentes, posibles visitantes y el primer invitado en el día de Navidad. Encontrar la moneda en tu pedazo se considera un signo de buena fortuna para el año siguiente. En algunas áreas, la česnica no se come durante la cena de Navidad, sino que se coloca en la mesa con una vela.
En varias regiones, la česnica también se utiliza para prácticas de adivinación. Por ejemplo, en Bosnia, se colocan semillas en las muescas de la masa para predecir la productividad de los cultivos. En Jadar, se colocan brasas del badnjak (tronco de Navidad) sobre la česnica para pronosticar el éxito agrícola. Históricamente, regiones como Herzegovina y Rugia han involucrado rituales alrededor de la česnica para asegurar una cosecha abundante en el próximo año. Estas prácticas destacan la profunda significación cultural y las ricas tradiciones asociadas con la česnica en las celebraciones navideñas serbias.