Hechos sobre: Muffin inglés
Los muffins ingleses son pequeños panes redondos y planos que muchos disfrutamos en el desayuno. Estas delicias fermentadas con levadura suelen cortarse por la mitad, tostarse y untarse con mantequilla. Son un alimento básico en el desayuno en países como Estados Unidos y Australia y ofrecen versatilidad para acompañarse con coberturas tanto dulces como saladas.
Uno de los usos más comunes de los muffins ingleses es en los sándwiches de desayuno, siendo el clásico Eggs Benedict un ejemplo por excelencia. Se cree que el término "muffin" proviene del bajo alemán, significando "pastelitos".
En Estados Unidos, los muffins ingleses ganaron popularidad gracias a Samuel Bath Thomas, quien comenzó a fabricarlos en Nueva York a finales del siglo XIX. Para 1902, el término "muffin inglés" ya estaba en uso oficialmente, y hoy en día, la marca de Thomas sigue siendo reconocida por sus muffins ingleses y bagels.
Existen varias variedades de muffins ingleses, incluyendo integral, multigrano e incluso versiones con sabores como canela y pasas. Curiosamente, en Gran Bretaña simplemente se denominan "muffins" para diferenciarlos de los muffins de estilo americano, que son más dulces.