Hechos sobre: Pastel de calabaza
El pastel de calabaza es un postre muy apreciado que muchas personas en Estados Unidos y Canadá esperan con entusiasmo durante el otoño y principios del invierno, especialmente en torno al Día de Acción de Gracias. Este delicioso pastel se elabora con un relleno de crema a base de calabaza y especias, típicamente canela, jengibre, nuez moscada, clavo, pimienta de Jamaica y, en ocasiones, cardamomo y vainilla. La mayoría de las veces, se utiliza calabaza enlatada o relleno de pastel de calabaza preenvasado para facilitar su preparación.
Para preparar un pastel de calabaza, se mezcla puré de calabaza con huevos, leche, azúcar y las mencionadas especias, luego se vierte la mezcla en una base de pastel y se hornea hasta que cuaje perfectamente. El resultado es un postre cremoso y lleno de sabor que captura la esencia de la temporada.
La historia del pastel de calabaza se remonta a los libros de cocina ingleses del siglo XVII, pero ha evolucionado con el tiempo en América del Norte. Para el siglo XIX, el pastel de calabaza se había convertido en un elemento fundamental de las cenas de Acción de Gracias, con cada región añadiendo su propio toque a la receta. Hoy en día, es un postre imprescindible para muchas familias durante el Día de Acción de Gracias tanto en Estados Unidos como en Canadá.
El pastel de calabaza también ha dejado su huella en la cultura popular, apareciendo en poemas y canciones que celebran ocasiones festivas como el Día de Acción de Gracias y la Navidad. Un dato curioso: ¡el pastel de calabaza más grande jamás hecho se elaboró en Ohio, pesando más de 3,000 libras y midiendo 20 pies de diámetro!