Hechos sobre: Dog meat consumption in South Korea
Comer carne de perro en Corea del Sur, conocido como "Gaegogi" tiene raíces que se remontan al período de los Tres Reinos en el primer siglo d.C. Sin embargo, en la actualidad es un tema controvertido tanto dentro del país como a nivel internacional, principalmente debido a preocupaciones sobre los derechos de los animales y la higiene. Aunque solía ser más común, especialmente entre las clases bajas, actualmente menos personas en la Corea del Sur moderna consumen carne de perro.
Ha habido movimientos significativos para frenar el comercio de carne de perro en el país. Se han cerrado importantes mataderos y mercados que comercializaban carne de perro. La situación legal es complicada: aunque existen leyes contra los métodos crueles de matanza, no hay una prohibición total de sacrificar perros para consumo. Esto ha generado mucho debate y diversas interpretaciones de la ley.
Varias razas, incluidas antiguas mascotas, se crían para carne en Corea del Sur. Algunos de estos perros provienen de fábricas de cachorros. Los métodos utilizados para sacrificar a estos perros—como la electrocución, el ahorcamiento o los golpes—han suscitado serias preocupaciones sobre el bienestar animal y la sanidad. Estas prácticas han atraído la atención y la crítica internacional, con muchos grupos defensores de los derechos de los animales y personas individuales haciendo campaña en su contra.
El debate sobre la carne de perro en Corea del Sur está altamente polarizado. Algunas personas lo ven como una tradición cultural con supuestos beneficios para la salud, mientras que otros lo consideran cruel e innecesario. Activistas, tanto en Corea del Sur como en el extranjero, están presionando por una prohibición del consumo de carne de perro, destacando casos de trato inhumano en el comercio. Este tema ha llevado a acciones legales y a varias campañas destinadas a crear conciencia y abogar por el cambio.